viernes, 9 de septiembre de 2011
Felicidad, que bonito nombre tienes.
Esta aquel que roza la felicidad con la yema de los dedos por un segundo o por trazos finitos de tiempo. Están aquellos que la encuentran día a día en las mejores sonrisas, aquellos que saben que la verdadera felicidad es imperfecta y no tratan de buscarla, dejan fluidez a cada momento...y todos los demás los que van en su busca, los que la persiguen sin ápice de satisfacción, esos que no se dan cuenta de que la felicidad es la que debe encontrarles día a día en las pequeñas pero grandiosas cosas que brinda la vida, porque estoy segura de que menos siempre es más.
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Emmm...me gusta esta entrada porque es lo que todos sabemos pero añadiéndole la filosofia que te caracteriza; las pequeñas cosas son las que te harán más feliz (o algo así era).
ResponderEliminarSi largo plazo las cosas que más recuerdas son esas pequeñas cosas que realmente te hicieron sentir. La felicidad como tantas cosas en esta vida no se fundan en una razón prudente..
ResponderEliminarLas pequeñas cosas son las más valuosas, porque no siempre lo más grande y bonito nos va a hacer más ilusión.
ResponderEliminarPero la mayoría de las veces lo creemos así e intentando alcanzar lo que creemos favorable por grande y bonito dejamos atrás lo que realmente nos haría feliz. Somos así y con el paso de los años te das cuenta de lo que vas dejando, de ahí tanto arrepentimiento hoy día, lo superficial no siempre esconde lo mejor, pero no todo el mundo es capaz de percibir tal sencillez.
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